Las mejores casetas de perro
30.10.2013
A menudo los arquitectos han de lidiar con sus clientes y tratar de llegar a un equilibrio entre las propuestas de unos y los intereses de los otros. La lucha se prolonga durante todas las etapas por las que pasan los proyectos: desde su planificación hasta la colocación del último detalle.
Pero cuando los clientes se expresan ladrando (o mordiendo), la cosa cambia.